– Este artículo es un trabajo de investigación realizado por los alumnos de

Centro de Grafología Sandra Cerro-

Que nuestra escritura cambia a lo largo de nuestra vida es un hecho. Lo normal es eso, que cambie, acompañando a nuestras fases de madurez, a nuestra personalidad, a nuestras emociones y estados anímicos.

Las modificaciones en nuestra escritura también pueden depender de otros factores, ya sean endógenos o propios del cuerpo humano (enfermedades psíquicas o físicas, estados emocionales o anímicos, etc) o bien exógenos o ajenos a nosotros.

A estos factores exógenos, que pudieran a primera impresión parecer inofensivos, dedicamos un taller en el centro de grafología, en el que participaron 15 alumnos de los cursos 1º y 2º Grado en Grafología y del Experto en RRHH. Todos ellos probaron en mano propia cómo se modifica la escritura dependiendo de diferentes condicionantes exógenos e involuntarios, aportando sus propias muestras y sacando las conclusiones que se van a exponer a continuación.

alumnos

Grupo de alumnos durante la práctica

Los factores que se experimentaron y analizaron fueron los siguientes:

– Escritura a diferente velocidad: lenta, normal, rápida, muy rápida

– Escritura en diferentes tipos de soporte: duro, blando, resbaladizo, liso, rugoso

– Escritura con diferentes útiles: lápiz, cera, rotulador grueso, rotulador punta fina, bolígrafo normal, bolígrafo fino, bolígrafo de gel, pluma estilográfica, plumín

– Escribiente en diferentes posturas: sentado, de pie, tumbado hacia arriba, tumbado hacia abajo

– Escribiente bajo efecto de movimientos involuntarios (cosquillas)

– Escribiente con mano guiada: mano semi-inerte, mano inerte

– Escribiente con los músculos tensionados

– Escribiente a oscuras

– Escritura ejecutada con la mano no adiestrada

Continua leyendo el artículo (pdf) completo en este enlace: Modificaciones involuntarias de la escritura